My Bloody Valentine con su dosis guitarras atmosféricas y plagada de un sinfín de pedales en combinación con voces etéreas y armoniosas, enamoró a todo el mundo. Sería inútil decir más de esta banda que sencillamente no necesita ningún tipo de presentación, ya que el simple hecho de decir Shoegaze es prácticamente sinónimo inequívoco de ellos.
Hoy, veintidós después salió (¡por fin!) el tercer álbum de su carrera.
MBV o también m b v es el nombre de este álbum.
Sin más preámbulos, con ustedes lo que será (sin dudas) uno de los álbumes del año. Y eso que no llevamos ni 40 días transcurridos del 2013.